Tras impresionar el pasado fin de semana con sus cuatro goles al Tottenham, el delantero argentino del Manchester City Sergio Agüero busca reivindicarse como uno de los grandes jugadores de la actualidad, siguiendo la estela de su compatriota Lionel Messi y del portugués Cristiano Ronaldo.

La repetidas lesiones que sufre desde su llegada al City (que le privaron de tres meses de competición la pasada temporada) le han impedido hasta ahora brillar con continuidad, demostrando su clase con cuentagotas.

La temporada pasada comenzó como un tiro, marcando 26 goles desde el inicio de temporada hasta finales de enero, pero después solo pudo marcar otros dos en lo que restaba de curso. Esta temporada, el exyerno de Maradona parece haber comenzado de la misma manera que el año anterior y ha marcado ya 10 goles en otros tantos partidos (incluyendo todas las competiciones).

En la Premier League anota un gol cada 59 minutos, inferior a los números de CR7 (un tanto cada 42 minutos con el Real Madrid), pero mucho mejor que su compatriota (un tanto cada 103 minutos de juego con en el Barcelona).

El 'Kun' ha marcado en los cuatro últimos partidos del City un total de siete goles y debería demostrar ahora esa misma eficacia en la Liga de Campeones, la máxima competición en Europa, empezando desde este mismo martes, con la visita de su equipo al CSKA de Moscú en la que los ingleses necesitan la victoria.

Como escuchar a Mozart

Agüero ha marcado 18 goles en 36 partidos disputados en la Champions, unos números muy alejados de los 69 marcados por Ronaldo o los 68 de Messi, pese a que el menudo argentino (1,73 m) es para muchos un potencial ganador del Balón de Oro (que se entregará el próximo 12 de enero).

"Ver a Agüero es como escuchar a Mozart" dijo su compatriota Mauricio Pochettino, entrenador del Tottenham, tras recibir cuatro goles del 'Kun' el pasado sábado (4-1). "Es uno de los tres o cuatro mejores goleadores del mundo", declaró su entrenador en el City, el chileno Manuel Pellegrini tras su demostración ante los Spurs.

"Con todas sus lesiones, la temporada pasada fue complicada, pero éste puede trabajar realmente bien. Cuando esté al 100% demostrará todo lo que tiene. Después, le corresponde a él luchar por ganar un día el Balón de Oro, pero tiene potencial para ello", añadió el técnico Citizen.

Con respecto a sus rivales, Agüero sufre un déficit de imagen, sobre todo porque las continuas lesiones musculares que parecen le alejan de los focos con demasiada frecuencia. Pero Agüero, a sus 26 años, tiene las condiciones ideales para mejorar aún más y este fin de semana ya se convirtió en el máximo anotador del City en la historia de la Premier League, con 61 goles, superando los 58 de su compatriota Carlos Tevez. Agüero llegó a Manchester en 2011 procedente del Atlético de Madrid a cambio de 45 millones de euros y el pasado verano (boreal) prolongó su contrato hasta 2019.

Con sangre fría

"Estoy contento de formar parte de la historia del City y solo espero continuar así", declaró el jugador, con modestia, tras su exhibición del pasado sábado, que hubiese podido ser mayor de no haber fallado un penal contra el Tottenham.

Su calidad le ha valido para ganarse el respeto y la admiración del vestuario del City. "Es uno de los que más sangre fría tienen ante el gol. Y puede mejorar aún porque es joven. También es un jugador importante en el vestuario, que sabe trabajar y brillar en el campo", ha declarado admirado el arquero Joe Hart.

El portero internacional inglés, no obstante, admite que Agüero "es de esos jugadores que, espero que no se enfade, ves en los entrenamientos y te dice que no sirven para nada, pero sabes que el día del partido será el que marque".

afp